Un día después de la luna llena.
No hay pan en Pavones. Fui al pueblo a comprar huevos y pan, pero no había pan en los tres supers (2 y 1 tiendita), se vendió todo el pan con el swell, «gracias a Dios» dijo el mae de la tiendita.
Cuando volví a Jr. sentí como volver a la casa después de andar lejos en un largo viaje, y aunque tal vez solo me fui media hora, es lo más lejos que he ido desde que llegué.
*La gloria de tormenta en buen refugio. Rayos y truenos y todo.
Extracto del capítulo Pavones-Pavones, Diarios del Carrocasa